jueves, 7 de junio de 2012

Reportaje Lupus Eritematoso Sistémico


Sintiendo el abismo de la muerte

¡Para mí sí tiene cura!

El Lupus Eritematoso sistémico o LES es una enfermedad reumática sistémica y crónica, además de afectar las articulaciones y los músculos, causa daños severos en la piel y en casi todos los órganos.

La oscuridad de la certeza termina siendo el gran sentido de la vida, es paradójico, pero realmente interesante. En ello se convirtió la vida de Thais Coronel, un camino misterioso que ahora debía recorrer.

Todo cambió después de 27 años teniendo una vida normal, posiblemente el destino le impuso una prueba donde el trofeo era sobrevivir. Las cartas estaban sobre la mesa, no tenía otra opción. Ahora era ganar o perderlo todo.

La rutina le daba inicio a un día como hoy. Pero hubo algo particular, que no había sucedido antes. Coronel no despertó anímicamente como de costumbre, y no solo eso, también notó dolores extraños en sus articulaciones. Desde ese momento mil preguntas pasaron por su cabeza. No recordaba haberse golpeado, sin embargo, no prestó atención y continuó su día.



Thais Coronel. Testimonio. Foto: Yhonay Díaz
Paulatinamente, cada despertar hacía el dolor más intenso, y así sucedió por cierto tiempo, hasta que decidió ir al médico. Los síntomas no eran “normales” para una mujer joven, activa, sin preocupaciones y con una vida medianamente feliz. Los resultados de los exámenes de rutina le indicaban que debía acudir a un especialista en afecciones musculares y articulares, un reumatólogo.

Allí estaba Coronel, en la sala de espera del consultorio. Preocupada, con una intriga que la iba consumiendo poco a poco. Llegó su turno, con las manos sudorosas, entró y conversó con el médico. Al salir, su rostro había cambiado totalmente, su expresión decaída deprimía cada sonrisa que se acercaba. Desde aquel momento, su vida tomó un rumbo desconocido. Estudios, medicamentos y cambios físicos se convirtieron en su nueva rutina.


El diagnóstico

Después de un seguimiento continuo en la evolución de la patología que estaba presentando, se dio un diagnóstico. Coronel padecía de una artritis reumatoide - una forma de artritis que causa dolor, inflamación, rigidez y pérdida de la función de las articulaciones-. Pero, eso no era todo, su sintomatología estaba cada día más ligada a una enfermedad crónica conocida como Lupus, en este caso Lupus Eritematoso Sistémico.

Para obtener el diagnóstico fue necesaria una serie de estudios de inmunología y autoinmunidad como la prueba de las Células L.E. son las que principalmente diagnostican un LES positivo o negativo, además de otros estudios complementarios como Anticuerpos Antinucleares y  Monotest.

Magaly Contreras, Bioanalista del Centro Clínico San Cristóbal asegura que, “el paciente empieza a decaer, a perder peso, baja su hemoglobina, hace unas células L.E. y si da positivo,  allí se diagnostica a un paciente con Lupus Eritematoso”.

          “Se hace el diagnóstico mediante una prueba de sangre, en una reacción, si aglutina el paciente es positivo, si no aglutina el paciente es negativo”, afirma Contreras

Lupus Eritematoso Sistémico (LES)

Es una enfermedad autoinmunitaria en la que los órganos, tejidos y células se dañan por la adherencia de diversos anticuerpos y complejos inmunitarios. Esta patología afecta principalmente a las mujeres y en una época de la vida en la que se es fértil (entre 20 y 40 años), sin embargo, existe predisposición en ambos sexos y en todas las edades.

La evolución de la enfermedad se desarrolla en fases de brote y otras en los que los efectos de la enfermedad remiten. Asimismo, hay lupus muy severos, medianamente severos y otros no tan graves como los que se manifiestan con afecciones en la piel.

·      Causas

La causa aún es desconocida. Sin embargo, siendo una enfermedad autoinmune hay distintos factores que pueden influir en el sistema inmunológico y provocar lupus.

La interacción entre susceptibilidad genética: Una región en el cromosoma 16 contiene genes que predisponen a Lupus Eritematoso Generalizado, artritis reumatoide, psoriasis y enfermedad de Crohn, lo que sugiere la existencia de “genes de autoinmunidad” que, cuando interaccionan con otros genes, predisponen a diferentes enfermedades autoinmunitarias

Medio ambiente: Los estímulos ambientales intensifican el LES. La luz ultravioleta provoca exacerbación del lupus en 70% de los pacientes diagnosticados.

 Género sexual: Las mujeres que han recibido anovulatorios orales –anticonceptivos- con estrógenos u hormonoterapia sustitutiva tienen mayor riesgo de padecer lupus.

·      Síntomas

Los síntomas no son iguales para todas las personas, tienen periodos de actividad y de inactividad. Casi todas las personas con LES padecen hinchazón y dolor articular. Algunas desarrollan artritis. Las articulaciones frecuentemente afectadas son los dedos de las manos, las manos, las muñecas y las rodillas.
Otros síntomas comunes abarcan:
  • Dolor torácico al respirar profundamente
  • Fatiga
  • Fiebre sin ninguna causa
  • Malestar general, inquietud, sensación de indisposición (malestar)
  • Pérdida del cabello
  • Úlceras bucales
  • Sensibilidad a la luz solar
  • Erupción cutánea, en forma de "mariposa" en las mejillas y el puente nasal que afecta a aproximadamente la mitad de las personas con LES. La erupción empeora con la luz solar y también puede ser generalizada
  • Inflamación de los ganglios linfáticos
Otros síntomas dependen de qué parte del cuerpo esté afectada:
  • Cerebro y sistema nervioso: dolores de cabeza, entumecimiento, hormigueo, convulsiones, problemas de visión, cambios de personalidad.
  • Tubo digestivo: dolor abdominal, náuseas y vómitos.
  • Corazón: ritmos cardíacos anormales (arritmias).
  • Pulmón: expectoración con sangre y dificultad para respirar.
  • Piel: color desigual de la piel, dedos que cambian de color cuando hace frío
Algunos pacientes sólo tienen síntomas cutáneos. Esto se denomina Lupus Eritematoso Discoide (enfermedad menos grave).

·      Tratamiento

La enfermedad se trata mediante inmunosupresión intensiva de ser posible, ya que hay un riesgo elevado de nefropatía en etapa terminal si los pacientes no se atienden o se tratan de manera inadecuada.

No hay una cura determinada para el lupus eritematoso sistémico y el objetivo del tratamiento es el control de los síntomas, mediante Antinflamatorios no esteroides (AINES) para tratar la artritis y la pleuresía - Es la inflamación del revestimiento de los pulmones y el tórax que ocasiona dolor torácico al tomar una respiración o toser-. Cremas que contienen corticosteroides - reducen la inflamación y a la vez afectan el sistema inmunológico- para tratar las erupciones de piel. Un medicamento antipalúdico –previenen el paludismo y la malaria- (hidroxicloroquina) y dosis bajas de corticosteroides para los síntomas cutáneos y artríticos.


Reumatología, especialidad de cabecera en pacientes LES

Eylen Camargo, médico reumatólogo del Hospital Central de San Cristóbal, hace una valoración general del Lupus Eritematoso Sistémico.

Es necesario aclarar que no es lo mismo una Artritis Reumatoide que un Lupus. El LES puede comenzar en un 60 ó 70%  con una Artritis (dolor, aumento de volumen en una articulación) y el tipo de artritis va depender de los otros síntomas que tenga.

El tratamiento para una artritis de adultos son antinflamatorios y fármacos modificadores de enfermedad como Metrotexate o Plaquinol, indicados vía oral de primera mano. Todos los fármacos tienen efectos adversos o secundarios, pero siempre que se utilice la dosis indicada y esté la patología clara, no debe haber efectos adversos.

Comúnmente a estos fármacos se les conoce como “quimios”, ellos son inmunorreguladores, la dosis utilizada es inmunorreguladora no quimioterápica, el Metrotexate se utiliza en el cáncer y también en el lupus, pero nosotros lo utilizamos en una dosis distinta, y a esta dosis el fármaco se comporta como un inmunorregulador.

Eylen Camargo, médico reumatólogo Hospital Central
Foto: Carolina Belandria
Mi explicación a la enfermedad se sustenta en que los seres humanos nacemos con una carga genética para tener determinadas enfermedades. Hay personas que vienen ya con esta alteración, y el ambiente puede encender la llama para que la enfermedad se exprese.

El 99% de estas enfermedades son crónicas y no se curan, se controlan, pero hay personas que dependiendo de sistema inmune que tengan, pueden  tener remisión y curarse, son pocas, pero puede existir, en eso consiste el tratamiento, siempre buscando la cura.

Hay muchos LES que debutan con un daño renal, no siempre es con problemas reumatoideos, eso va depender de la carga genética, no hay un patrón único. Hay un dicho en medicina que dice: “no hay enfermedades sino enfermos”. Cada ser humano tiene un sistema inmune distinto y las enfermedades comienzan de cualquier manera, pueden comenzar con afecciones en piel, daño renal, con un cuadro articular o cambios vasomotores.

Como reumatóloga aconsejo que acudan al médico al presentar una sintomatología cercana a la del LES. Esto es una enfermedad como cualquier otra que requiere de ciertos cuidados, debe tener un control periódico y manteniendo el tratamiento farmacológico la historia podría ser otra, afirma Camargo.

Evolución de la enfermedad en nuestra paciente

Después de haberse determinado la patología que presentaba Coronel, se inició con el proceso de control de la enfermedad que, consistía en la medicación adecuada para estabilizarla, para ello fue necesario comenzar un tratamiento a base de inmunosupresores, utilizados  para disminuir los procesos inflamatorios a nivel reumatoide. El Metrotexate, fue el primer fármaco utilizado como inmunorregulador de la enfermedad. Este era el primer paso de su tratamiento.

Al  cabo de unos seis meses se inició la segunda fase del tratamiento. Ahora Coronel debía añadir otro inmunosupresor entre sus fármacos, el Plaquinol. Este medicamento era mucho más fuerte que el Metrotexate, aún así debía tomarlos juntos. La reacción de Coronel ante la medicación era de esperarse, su peso disminuía desconmunalmente, así como estado anímico, hasta su cabello se resquebrajó. “A mí no se me cayó el cabello como le pasa a las personas que padecen de cáncer, a mí se me partía el cabello como a 10 centímetros de la raíz. Cuando me peinaba caían los mechones en el piso”, aseguró la paciente.

Las reacciones al medicamento eran cada vez más fuertes, por ello su reumatólogo sustituyó el Plaquinol por el Cellcept. Este fue más tolerado por el organismo de Coronel, aunque también hacía reacciones con él, pero mucho más leves que las que estaba presentando con el medicamento anterior.

Los tres años en los que Coronel ha padecido ha sido netamente una prueba de supervivencia, donde ha tenido que luchar cara a cara con la muerte. El haber desarrollado una enfermedad autoinmune como el LES le trajo otras complicaciones que suelen afectar a la mayoría de los pacientes LES positivos.

A lo largo de su enfermedad, presentó otras patologías como Leishmaniasis, producida por la picadura del zancudo que trasmite esta afección. Del mismo modo manifestaciones gastrointestinales, Gastritis. También cardiacas, como la Carditis –inflamación del corazón-, llevada a una Pericarditis –inflamación del pericardio-. Complicaciones pulmonares como la Pleuritis con derrame pleural –acumulación de líquido en el espacio pleural-. Todas estas patologías fueron tratadas con antibióticos y medicamentos a base de esteroides.

Luego presentó un nuevo cuadro patológico. Al adquirir una infección urinaria, se descubrió que tenía la bacteria Escherichia coli. Esto conllevó a reestudiar su caso y se dio un nuevo diagnóstico. La enfermedad de Coronel había avanzado significativamente, y ahora estaba presentando un cuadro de Nefritis Lúpica en estadío V.

La Nefritis Lúpica de Coronel

Esta patología ocurre cuando las nefronas se dañan, éstas son parte de la estructura del riñón, pero a nivel microscópico, el lupus que es una enfermedad relativamente inmunológica produce el daño en el riñón, y se da inicio a lo que comúnmente se conoce como fallas renales. Se diagnostica mediante una biopsia renal, por pruebas de funcionalismo renal, urea, creatinina y examen de orina básicamente.

Eddy Luz Angulo, médico nefrólogo Ipasme
Foto: Yhonay Díaz
“El 90% de los pacientes con LES tienen nefritis lúpica en varios grados, en el caso de Coronel, ya se encuentra en un estadío V, eso significa que su riñón ya no cumple su función”, asegura Eddy Luz Angulo, médico nefrólogo del Ipasme San Cristóbal.

“Si el riñón afectado está en uno de los primeros estadíos, no es que se recupera sino que se puede mantener, mientras que se detecte a tiempo hay más probabilidades de hacer un tratamiento”, acotó Angulo.

En el caso de la Coronel, se está cumpliendo un tratamiento de suplencia renal con la diálisis, que hace lo que no puede hacer el riñón. La única solución para corregir esta patología es mediante un trasplante de  riñón.

Angulo añadió que, “los tratamientos farmacológicos utilizados son los esteroides, los que son a base de corticoides. Ayudan a la parte inflamatoria generalizada que produce el lupus.  Los daños que causan los esteroides afectan las suprarrenales, los riñones, entre otros, pero si no se cumple el tratamiento con esteroides el daño es mucho mayor (…) estando en diálisis estos tratamientos los utilizan para evitar otras complicaciones, pero al riñón no le va a hacer nada, ya la enfermedad nefrítica está establecida.

Tres años después

          Coronel ha atravesado los tres años más difíciles de su vida. Hoy día tiene 30, y aún no puede trabajar. Ve como utópica la posibilidad de tener hijos, no quiere que hereden su genética y adquieran el LES, piensa en la adopción. No tiene una pareja, pues quien era su novio la dejó sola en el momento más duro de la enfermedad.

          Las ganas de superar esta dura batalla la llevó a levantarse después de permanecer 1 año en cama, ella se describe “como un vegetal”, sin poder moverse, la inflamación era aguda y no tenía fuerzas para mantenerse de pie.

          Sin embargo, cuenta con el apoyo de su familia, quienes han estado con ella día a día viviendo su pesadilla. Está motivada a retomar su vida normal, las esperanzas son muchas, pero las ganas son inconmensurables.


Paciente con nefritis lúpica estadío V
          “Verle la cara a la muerte no es nada fácil, y mucho menos saber que respira cerca de uno,  pero sí se puede, los médicos me dan muchas esperanzas de vida. Sé que después del trasplante seré la misma Thais que era hace tres años (…) ¡esta batalla es mía, porque para mí sí tiene cura!”. Estas fueron las palabras de Coronel al terminar de contar su historia.




Índice estadístico de pacientes diagnosticados LES positivos en el Hospital Central de San Cristóbal (Mayo 2012)
 Durante el mes se estudiaron 14 casos que confirmaron esta patología















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